¿Y tú, qué quieres ser de mayor? Ser, hacer, tener.

Suena «Now that I’ve found you», y aunque pueda parecer que una canción de Liam Gallagher no tiene nada que ver con trabajar, tiene que ver con un primer paso. Con aquel dedo que quería mover. Se ha convertido en una de las canciones de los últimos meses, y lo es por muchos motivos. Durante mucho tiempo pensé que haciendo mucho tendría mucho. Estaba equivocado. ¿Y tú, qué quieres ser de mayor? Hoy la entrada va de «ser, hacer, tener»

Una de las cosas más útiles que he aprendido en toda esta travesía es que somos uno, un ecosistema dentro de un cuerpo y una mente. Que no se puede separar lo que somos de lo que hacemos, y que, salvo que estés enfermo de materialismo, tener no te hará feliz. Grábate esto a fuego.

Ser, hacer, tener. Que no se te borre esto.

Hablaba hace unas líneas de una canción de Liam Gallagher, que poco tiene que ver en esto, o sí. Durante muchos años he obviado este principio de tres fases: Ser, hacer, tener.

No me había ido mal hasta entonces, pero faltaba algo.

Now that I’ve found you (ahora que te he encontrado) dice la letra de la canción, I won’t let go (no te dejaré marchar). Una vez que lo encuentras, aprendes que por mucho que quieras tener debes hacer previamente has dado un gran paso. Pero no es el paso.

El paso definitivo es cuando aprendes que antes de hacer, de tener, debes SER.

Y esto, querido lector, no se enseña en las escuelas de negocios. De hecho, hasta que no lo comprendí hice, hice más, seguí haciendo, pero no me sentí realizado. No estuve convencido de llevar el rumbo adecuado.

Por no decir mentiras, la verdad estaba ahí fuera. Hay mucha gente que te puede hablar de la importancia del «ser, hacer, tener», en google hay cientos de textos y vídeos al respecto.

Luego hay personas que, sin conocerlas, aparecen en tu camino y te ayudan a ver la luz, como es el caso de Álvaro Sánchez y David Moral desde su podcast «cambiavidas» Quédate con el cambio, sabandija asquerosa, pero esa verdad tiene que entrar en ti.

No todo el mundo está preparado para ello.

Hacer por hacer, como pollo sin cabeza, no te lleva a ser. Tener más no te lleva a ser. Pero no es fácil entender que primero hay que ser.

El otro día un advenedizo que parece que tiene mucho, habrá hecho mucho pero también tiene mucho de fachada, se permitía darme consejos en twitter sobre mi profesión. ¿Por qué no le tomé en serio? No ES. Puedes haber hecho mucho y tener mucho, pero ser un imbécil, no estoy diciendo que lo sea.

¿Recuerdas aquello de qué quieres ser de mayor?

Nuestra cultura está llena de tópicos, a los niños se les siguen haciendo las mismas gracias hoy que hace 30 años, y mucha gente sigue preguntando a niños y adolescentes qué quieren ser de mayor. Y ahí estaba el secreto.

Nunca, jamás, nos preguntaron «qué quieres hacer de mayor», y mucho menos «qué quieres tener de mayor».

– «Un ferrari, abuela».

¿Imaginas su cara? Yo tampoco.

Estaban haciendo la pregunta correcta, aunque siempre respondíamos erróneamente. Respondíamos qué queríamos hacer de mayor.

Los pasos para ser.

Pudiera parecer que al imbécil de twitter (si me permitís llamarle así) lo discriminé por no ser. Pero no fue así. Cuando sabes qué quieres ser aprecias mucho todas las opiniones, algunas te importan y otras simplemente las dejas pasar de un oído al otro. Las respetas, pero no las compartes.

De nada sirve hacer como máquinas, como unidades de producción, con la finalidad de tener si no sabes qué quieres SER, o tú, o tus proyectos.

El planteamiento de aquel individuo iba encaminado a hacer unas cosas y a no hacer otras.

Define qué quieres ser.

Da igual lo que quieras ser, o lo que quieras hacer antes de ser. Lo primero que has de hacer es saber qué quieres ser de «mayor».

No es un proceso fácil. Hay muchas maneras, hay cientos de modelos. Pero eres únic@. Una vez lo tengas claro, una vez estés convencido, el siguiente paso será más certero.

¿En qué te tienes que convertir? ¿Cómo quieres ser?

Ahora ponte a hacer.

Y no desistas. El éxito llegará, pero no será pronto.

La verdad es que suele estar más lejos de lo que piensas pero más cerca de lo que imaginas cuando te desanimas.

Cada uno tenemos un concepto de éxito, hay quien lo tiene en ese ferrari del que hablaba anteriormente, hay quien lo encuentra en tener mucho dinero, pero es relativo. Lo tendrás que definir.

Tener está cerca.

Puede que si defines bien lo que quieres ser cambie tu percepción del tener. Cuando hagas siendo todo cambiará. Será diferente. No tengo la fórmula para tener, pero sé que haciendo de una manera diferente el camino es más llevadero.

Y sí, lo de disfrutar y aprender del camino es cierto.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Pin It on Pinterest

Share This